El Inquisidor.
La naturaleza es muy sabía y por eso hay especies que tienen facultades limitadas, y algunas otras que logran crearse a si mismas, sin embargo en el animalario político de la tierra de las guayabas hay unos que aunque se saben la tonada se niegan a rebuznar.
Y es que lamentablemente se nota que el secretario del ayuntamiento nomás no sabe ni que hacer, esta metido en un entuerto personal, y respetable, además de que no esta dando el ancho, y mire que no es nada delgado, Gustavo Méndez Aguilar.
Sabíamos que sus capacidades políticas son bastante limitadas, sin embargo se acotan más con la rienda que le puso el síndico José Jesús Rentería Mujica, quien por nada del mundo quiere soltar el control de la secretaria del ayuntamiento, poniendo a quien le rinda pleitesía y obedezca sus órdenes.
Pobre Gustavo Méndez, sin capacidad de desicion, sin una meta fija en política y siendo usado para mantener el orgullo político de su patrón Rentería, sabrá que es el secretario el que se debe de hacer cargo de la política interna del municipio?, que es a el a quien corresponde la interlocución entre las fracciones políticas del ayuntamiento?, que toca a la secretaria del ayuntamiento sacar la cara por el presidente en asuntos espinosos??
Parece que nada de esto sabe el buen Gustambo, porque se ha convertido en un inalcanzable, un ente zombi que sólo obedece lo que su amo le indica, y que al negarse a recibir a la población, ya no hablemos de la prensa, esta hachando a la borda lo poco que políticamente tenía.
Debe de abrir los ojos y darse cuenta que aunque le caiga mal políticamente la gente del módulo de riego y en especial Ricardo Rosas Raya, tiene la obligación de recibirlo, de dialogar y dar soluciones a los problemas, y como suele suceder en la administración del maltrecho Rito Vargas, «Salió peor el remedio que la enfermedad»sin que esto signifiqué que regrese Rafa Samano.
El tiempo le dirá al PAN, principalmente a Arturo Navarro, que para solucionar el problema. Se requiere escuchar, no sólo oír, a varias personas, y no sólo tratar de taparle el ojo al macho… Al tiempo y veremos que Navarro, se equivocó.