El Inquisidor.
A quienes piensan que la salida de Rafa Samano de la secretaria, es el fin de esta columna, están equivocados, la filmación de la película y una intervención quirúrgica nos alejaron un poco de la escribidera, pero aquí estamos de regreso, sin una parte del organismo pero de regreso.
Les comentamos, sobre los acontecimientos más relevantes de la región:
Salvatierra se convulsiono unos días antes del fin de la feria de La Candelaria, con el rumor de que al presidente lo habían intervenido de urgencia en un hospital local de una apendicitis, y que se había complicado, por lo que lo trasladaron a Celaya.
Este rumor nunca fue confirmado o desmentido por ningún personaje de la administración local, y dejos miles de preguntas y muchos más chismes: que si se le pasaron las copas en el baile de la Arrolladora, que si es por comerse los corajes que le hacen pasar sus funcionarios por no enfrentar los cuestionamientos, y muchos más por el estilo.
A esta crisis todos le dieron vuelta, menos el síndico, quien de inmediato se ungió como el sucesor natural del alcalde, y hasta se hace llamar encargado de despacho, pero sólo de bloff pues no resuelve.
Imaginese que le llamaron de una embajada de sur América para darle una información sobre la visita de grupos musicales y artísticos a la tierra de las guayabas… Y no pudo, o quiso, responder la llamada, tal vez porque la hacia un paisano que es diplomático en centro América…
Una más que nos pasan desde TARIMORO, es que se compraron o rentaron, un puño de radios Nextel, como 40, solamente que en este pueblo la señal de radio es escasa casi nula, y pues de poca utilidad les será.
Solamente que ahora que el Sr. Presidente se enteró de que le estaban «grillando» la compra de los radios mando poner antenas para que hubiera señal, lo malo es que sólo se pusieron en la presidencia, no en todo el pueblo…
Y ya que andamos por esta tierra cacahuatera, les comentamos que ojalá que todo se resolviera con una sonrisa, y así la directora de servicios municipales, sería maga, hechicera y gurú del alcalde, ya que se la pasa riendo y con esa sonrisita socarrona, oculta sus intenciones.
Es de la vieja guardia, de la gente que se hizo y sobresalió con Miguel Canelo, y que ahora lo desconocen y repudian, es una dama que no sabe decir que no, y menos si es el patrón el que pregunta, ordena, o exige, «Si Marcos, tu cress… Jijijiji» esa es su frase favorita, y considera que con eso ya estuvo y así mantendrá su chamba.
