SALVATIERRA.-
Le dan el último adiós al joven Héctor Almaraz luego de la velación en su domicilio en la colonia Progreso donde inició el cortejo fúnebre hacia la misa de cuerpo presente en la Parroquia de La Luz, de ahí el cuerpo fue sepultado en el panteón Villa de La Paz.
Héctor Almaraz de 16 años de edad fue entregado a su familia para ser velado en su domicilio ubicado en la colonia Progreso donde recibió la visita de cientos de personas a lo largo de dos días de velación.
Poco después de las 12:00 del mediodía salió el cortejo fúnebre desde su domicilio hacia la carretera salida a Cortázar para atravesar el Boulevard e incorporarse a la calle Hidalgo hasta llegar al Jardín que rodearon para poder ingresar al Santuario Diocesano de Nuestra Señora de La Luz a la misa que se programó para la 01:00 de la tarde.
En el recorrido lo acompañaron decenas de personas que portaban prendas blancas, que representa la pureza de su alma y juventud, destacando que el cuerpo no fue llevado por la carroza, sino por una camioneta particular en la parte de la caja, donde era acompañado por familiares.
Cabe mencionar que una banda de viento acompañó el recorrido tocando algunas canciones como “El muchacho alegre”, “Cruz de madera”, “El Rey”, entre otras; estando hasta el final del recorrido un grupo de jinetes.
Al llegar a la Parroquia de La Luz ya lo esperaba el templo lleno de personas, por lo que algunos asistentes tuvieron que escuchar la misa desde la parte de afuera acompañando en la misa de cuerpo presente dando el pésame a los familiares.
“No hay palabras para describir lo sucedido aquella noche, incluso nos podríamos cuestionar ante Dios el por qué se llevó a personas jóvenes, por qué se llevó a personas buenas, pero esas preguntas no nos llevarán a ningún lado más que la desesperación, por lo que los invito a acercarse a Dios y orar por estas almas buenas que han partido; Héctor Almaraz seguirá viviendo en el amor que se le tiene y eso nunca nadie se los podrá arrebatar”, dijo el sacerdote.
Al ir saliendo de la Parroquia fue despedido con aplausos para ser subido nuevamente a la camioneta que lo trasladó hacia el panteón Villa de La Paz en donde fue sepultado ante la compañía de cientos de personas que lo querían entre su familiares, amigos y conocidos.
